domingo, 19 de junio de 2011

El calor

Madrid
40 grados Celsius

Ayer

Un hombre se tiró de la ventana de su apartamento porque el aire acondicionado se había estropeado.

Su cadáver arruinó la mañana a dos barrenderos que apenas habían podido dormir por el calor y el ruido de su edificio.

Un estudiante tiró su ordenador por el balcón de su habitación porque calentaba el ambiente.

Cayó sobre una señora que había salido a tomar el aire a la calle. La mató.

Esa misma señora acababa de asesinar a su marido porque le daba calor estar acostada junto a él. Le cortó el cuello con las aspas de un ventilador.

Esa pareja vivía en un bloque de pisos de protección oficial, el mismo que habitaban los dos barrenderos y a dos manzanas del hombre que se suicidó.

Yo vivo tres calles más abajo.
Llevo dos semanas sin dormir.
No sé cuánto aguantaré.